En la búsqueda de la valorización de productos regionales (NEA, NOA, Patagonia) el objetivo de este trabajo fue optimizar el proceso de deshidratación de arándanos por combinación de calentamiento infrarrojo y aire caliente, proporcionando valor agregado a la fruta fresca que no puede ser comercializada como tal. Se utilizó un secador de tipo túnel con aire caliente y radiación infrarroja (1950W). La deshidratación de los arándanos se realizó a 100ºC, 110ºC y 120ºC (10-180 min). Se analizaron los efectos de pretratamientos superficiales de la fruta antes de la deshidratación: 1) microperforaciones de la piel; 2) lavado de la cera superficial con etanol y 3) combinación de ambos tratamientos. En las pasas obtenidas se evaluó también el contenido de antocianos y la capacidad antioxidante. Se construyeron curvas de secado, se determinaron las difusividades efectivas y se estudió la cinética de contracción de volumen y cambio de color. Las condiciones óptimas para la deshidratación de arándanos resultaron en la combinación de inmersión en alcohol y la perforación, aire a 120ºC y 1,5 m/s y potencia IR de 1950 W por 60 minutos. Sin embargo, se redujo significativamente el contenido de los compuestos antociánicos y su efecto como antioxidante natural. Por lo tanto, se recomiendan condiciones de proceso de 120ºC a velocidad constante de 1,5 m/s durante 70 minutos, con el pretratamiento de pinchado, donde se obtuvieron pasas con una retención de antocianinas de 49,6% y un porcentaje de inhibición del radical DPPH de 64%.